Todos hemos escuchado hablar acerca de la Ouija pero en muchas ocasiones no le damos importancia. Este juego de origen casi desconocido es muy popular desde hace más de un siglo y muchas personas se dejaron llevar por la curiosidad y participaron de este tipo de prácticas. Si bien la lógica nos dice que es imposible comunicarse con los muertos, diversos casos relacionados con la Ouija se han hecho famosos por terminar en lamentables tragedias donde las personas que participaron de las sesiones espiritistas terminaron muriendo en extrañas circunstancias.
1. La adolescente estrangulada
En diciembre de 1972, una joven muy impresionable y nerviosa llamada Jennifer Lynn Sprigman, jugó la Ouija con una compañera de escuela. Con sólo 14 años, la adolescente hizo contacto y su primera pregunta fue a qué edad iba a morir. La respuesta no se hizo esperar: “18”, “asesinada”, “estrangulada”, fue lo que el tablero señaló. El 3 de octubre de 1976, a dos semanas del cumpleaños número 18 de Lynn, la joven de Illinois murió estrangulada. El asesino nunca fue encontrado.
2. El derrumbe misterioso
El 25 de noviembre de 2007 cinco adolescentes ingresaron en una casa abandonada con el objetivo de poder jugar a la Ouija en un lugar tétrico. Los jóvenes preguntaron al espíritu con el que se comunicaban si le molestaba la presencia de alguno de ellos, y éste, supuestamente, les contestó que tres de ellos tenían que marcharse. Cuando éstos se retiraban y ya estaban a una distancia considerable vieron cómo la casa se derrumbó de un momento a otro, dejando sin vida a sus compañeros que se quedaron adentro.
3. Asesinato por encargo
Julio César Miranda era un adolescente cuando jugó a la Ouija con un compañero del colegio, lo que provocó que ambos sean poseídos por un ente maligno. Según la madre del chico, Julio César empezó a hacer cosas extrañas como salir a la calle desnudo o hacer sus necesidades en público y un día le dijo a su madre que el demonio le había dicho que la matara a ella y a su hermana. El muchacho terminó cogiendo un cuchillo e hiriéndose en el estómago, lo que le provocó la muerte.
4. Una aterradora confesión
En el año 2000, siete estudiantes universitarios se reunieron para jugar a la Ouija y una de las participantes no dudó en preguntar a qué edad iba a morir. El tablero contestó con el número 31 y la palabra "anorexia". En ese momento la joven confesó a sus compañeros que desde hace ya varios años sufría de bulimia y anorexia. Los años pasaron y se supo que esa muchacha falleció a causa de un ataque cardiorrespiratorio provocado por complicaciones de las enfermedades antes mencionadas. Tenía 31 años.
5. Varios entes en un solo cuerpo
Estefanía Gutiérrez era una adolescente española que había jugado un par de veces a la Ouija con sus amigas del colegio. Una de esas ocasiones, una profesora las descubrió y al hacerlo vio cómo el vaso de vidrio que estaban usando a manera de ‘aguja’ se rompió y un ‘humo negro’ se metió por la nariz de la joven. Estefanía aseguraba que sentía la presencia de varias personas dentro de ella y empezó a convulsionar. Meses después falleció sin conocerse exactamente los motivos.
La Ouija es todo un misterio y a pesar de los casos registrados que han terminado en tragedia, las personas continúan jugándolo como si nada pasara. Nadie puede determinar si es que realmente se puede establecer una conexión con los muertos pero las diversas historias que se han conocido en los últimos años generan dudas.
Si quieres saber más acerca de este siniestro juego no puedes dejar de ver “Relatos para no dormir” este domingo a las 10:30 pm por Panamericana Televisión, donde tendremos una historia realmente aterradora que abarca el tema que hoy hemos tratado. Quizás este programa cambie tu forma de pensar acerca de la Ouija. ¿Te atreves a verlo?