Un gran grupo padres de familias reportó, en las últimas semanas, que una broma escolar está dejando a sus hijos sin acceso a WhatsApp. El simple cambio de nombre en un grupo de la compañía puede provocar que la compañía bloquee el número de teléfono de todos sus miembros.
La peligrosa broma consiste en cambiar el nombre del grupo por un término como ''porno infantil'', para los que WhatsApp tiene una política de ''tolerancia cero'', según sus términos de servicio.
Los mensajes de WhatsApp están cifrados, con lo que la compañía no ve lo que se comparte en cada grupo. Se guía por tanto por el nombre o la imagen del grupo para saber si allí ocurre algo ilegal.
''Para ayudar a prevenir imágenes de explotación infantil, WhatsApp confía en toda la información sin cifrar accesible, incluidos los informes de usuarios'', explica la empresa.
Mediante este sistema, WhatsApp bloqueó 250 mil números cada mes durante el último trimestre. Una parte de esos casos fueron víctimas de una broma o reto macabro.