Margaret Chan, directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), consideró “grave” la situación tras la propagación del virus chikungunya en América Latina, por lo que recomendó a los países afectados la prevención de esta enfermedad desde un "enfoque social muy abarcador".
Opinó que los gobiernos deben ser "activos" en cuanto al control del vector transmisor y en la adopción de medidas para proteger a la sociedad, pero también apeló a la responsabilidad individual y de las familias. Chan declaró en una conferencia de prensa en La Habana, Cuba, donde se han diagnosticado 11 casos hasta el momento, todos importados.
Hacia el final de su tercera visita oficial al país, Chan se reunió el lunes con el presidente Raúl Castro. Junto a él inauguró este martes la nueva sede de los centros para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed) y del Nacional Coordinador de Ensayos Clínicos (Cencec), en la capital.
La chikungunya, que se transmite de una forma similar al dengue y a través de la picadura de los mosquitos aedes aegypti y aedes albopictus, provoca fiebre, dolor articular y erupciones, entre otros síntomas. Fue detectado en América Latina hace seis meses en la región caribeña, donde el primer caso se registró en República Dominicana.
Según informó la Organización Panamericana de la Salud (OPS) el pasado 3 de julio, se han registrado 21 muertes por este virus, 4.756 casos confirmados y 302,081 casos sospechosos, de ellos 193,395 en la República Dominicana.
