Luego de denunciar que recibió presiones desde el Gobierno para ascender a dos coroneles, sin cumplir con los requisitos, el excomandante general del Ejército, José Vizcarra Álvarez, informó que ha solicitado al comando de su institución que “extienda la seguridad” a su familia, más aún luego que asaltaran a su hija en la puerta de su casa.
“He solicitado al comando que extienda la seguridad a mi familia. El miércoles 13 de octubre, justo el día que culminaron los ascensos de generales, hubo un asalto en la puerta de mi casa, a consecuencia del tiroteo salió herido el chofer de la seguridad de una de mis hijas. Jamás se aclaró si realmente fue un asalto de delincuentes comunes u otra cosa y eso es lo que más me preocupa”, expresó Vizcarra en RPP.
En horas tempranas, el excomandante general del Ejército confirmó a RPP que existieron presiones del presidente Castillo y el ministro de Defensa Walter Ayala para que se realicen ascensos en su institución, a los cuales se rehusó, pues no correspondía según la meritocracia.
LO SORPRENDIERON
El militar que fue relevado del alto cargo aseveró que nunca se le explicaron los motivos por los que se le separó del cargo: “Solo por no haber complacido los pedidos de ascenso”, expresó.
