El exbugomaestre de Lima, Castañeda Lossio, percibió dinero para su campaña municipal proveniente de la constructora OAS. Las declaraciones de Leo Pinheiro y la del colaborador eficaz 101, el pasado abril, confirmaron que la empresa brasileña entregó $220 mil para hacerse de licitaciones en lo que sería la tercera gestión de del líder de Solidaridad Nacional.
El expresidente de OAS, Leo Pinheiro, confesó el último 26 de abril desde Curitiba a los fiscales peruanos que ofreció a Castañeda Lossio $100 mil de aporte para su campaña. Este monto se habría gestionado en un primer momento a través de Giselle Zegarra, quien fue gerente de inversión privada de la Municipalidad de Lima (MML) en las dos primeras gestiones de Castañeda.
Después, el hombre clave en esta transacción fue Martín Bustamante, quien es actual secretario general del partido Solidaridad Nacional y expresidente del Directorio de la Empresa Municipal Administradora de Peaje de Lima (Emape).
Este desembolso habría sido ratificado por el colaborador eficaz, quien habría señalado que “Fracassi y Pinheiro han logrado estar con el entonces candidato Castañeda, por lo que me acuerdo, en por lo menos tres oportunidades, de las cuales dos de ellas han sido en el departamento de Bustamante. En otra oportunidad en lo que, según sé, se conocía como la casa (del) señor Castañeda en Surco, en dichas citas OAS presentó al candidato Castañeda diversas ideas de inversiones privadas que se podían implementar y querían saber si se encontraban de acuerdo a su política de gobierno municipal”.
También añadió que “el señor Fracassi se dirigió al departamento del señor Bustamante, un lugar en Miraflores, donde Bustamante le pidió 220 mil dólares a ser entregados en dinero. La entrega se hizo por (a través de un) courier que no tenía ningún conocimiento de lo que estaba haciendo. Bustamante llamó a Fracassi para confirmar (la recepción). El dinero fue proporcionado por el señor Alexandre Portela o por Ramilton Machado, de la oficina de la controladoria”.
La ‘controladoría’, que en español viene a ser contraloría, se refiere a la oficina que la constructora usaba para concretar sus ilícitos.