Un equipo de Panorama fue testigo del arduo trabajo de los agentes del Inpe para evitar el ingreso de objetos prohibidos al centro penitenciario de Cañete. Y es que muchos familiares que visitan a los presos pretenden introducir al penal chips, celulares y hasta gran cantidad de droga.
Es el caso de una mujer, quien tenía escondida entre sus prendas dos teléfonos. Ella tenía programada una visita a su hijo, sin embargo, las autoridades descubrieron que llevaba los móviles en la requisita de ingreso al penal. Los celulares fueron incautados y se realizó el informe respectivo.
Otra mujer intentó ingresar bidones de pintura para remodelar la celda de su familiar. Al realizar el control de rutina, los agentes del Inpe hallaron dentro de los envases decenas de celulares, así como baterías, tarjetas bancarias y hasta droga de diferente tipo y denominación.
DELITO QUE SE PAGA CON CÁRCEL
Javier Llaque Moya, jefe del Inpe, aseguró que gracias a la tecnología los controles en los penales se hacen cada vez más efectivos. Asimismo, la autoridad recordó que ingresar objetos y sustancias prohibidas a los centros penitenciarios constituye un delito que se paga con prisión efectiva.