Una de las intervenciones policiales más importantes de los últimos años tuvo lugar el último sábado en el penal de Lurigancho donde más de 2 mil policías y 50 fiscales ingresaron por sorpresa este centro penitenciario.
Con ayuda de combas, los policías rompieron las puertas de las celdas del pabellón 10 y lograron incautar 16 celulares, 5 memorias USB, dinero en efectivo, varios paquetes con droga y cuadernos con los números telefónicos de empresarios.
Asimismo, un módem que brindaba conexión simultánea a Internet para 8 celulares. Dicho aparato era utilizado para que los internos puedan ingresas a las redes sociales como Facebook y buscar información de sus víctimas.
Con esta acción se ha buscado poner en orden el penal y acabar con los extorsionadores que operan desde este recinto. Según la policía, a través de este negocio delincuencial, cuatro clanes han creado empresas, comprado hoteles, centros de lavado de carros, entre otros.
A continuación, en Panorama, todos los detalles de la estratégica intervención a diversos delincuentes actualmente presos pero que continúan dirigiendo un sofisticado sistema de desparecer el dinero obtenido producto de las extorsiones.