El chicharrón, uno de los platos más representativos de la cocina peruana, mueve cada año una millonaria economía en el país. Según el Ministerio de la Producción (Produce), solo en 2024 se registraron más de 730 locales formales especializados en este producto, concentrándose la mayoría en Lima (40%), seguida por Cusco (12%) y Puno (6%). En total, esta actividad genera más de 8,900 empleos formales a nivel nacional.
El pan con chicharrón en la mira mundial
El ministro Sergio González Guerrero precisó que el sector produce alrededor de 3,000 toneladas de chicharrón al mes, lo que equivale a ventas superiores a los S/ 244 millones anuales. Esta cifra representa cerca del 0.7% de todo el sector Restaurantes y el 0.02% del PBI. El impacto económico coincidió con la reciente exposición internacional que recibió el pan con chicharrón, tras el concurso Mundial de Desayunos organizado por el streamer español Ibai Llanos, donde la propuesta peruana captó gran atención en redes sociales.
El consumo de chicharrón también muestra marcadas diferencias regionales. En promedio, cada peruano consumió 5.3 kilos en 2024, aunque regiones como Ucayali (35 kg), Tacna (15 kg), Ayacucho (12 kg) y Madre de Dios (9 kg) superaron ampliamente el promedio nacional. Los precios oscilan entre S/ 70 y S/ 140 por kilo, mientras que un pan con chicharrón puede costar entre S/ 10 y S/ 30, según la calidad de la carne, el tipo de local y la presentación.
En cuanto al gasto de los hogares, Produce informó que en 2024 se destinó en promedio S/ 33 mensuales a la compra de chicharrón. Ucayali lidera el consumo con S/ 83, seguida de Tacna (S/ 70), Madre de Dios (S/ 69) y Ayacucho (S/ 60). A nivel socioeconómico, los hogares del estrato A son los que más invierten en este plato (S/ 51 al mes), mientras que en el nivel E el gasto alcanza los S/ 35.