El aumento de la extorsión en el Perú ha provocado el cierre de más de 300 colegios a nivel nacional en los últimos meses y 11.000 contando desde el 2020, afectando la educación de miles de niños y jóvenes. La inseguridad y el temor a represalias han obligado a diversas instituciones a cesar sus actividades, dejando a docentes y alumnos en la incertidumbre.
Colegios cerrados por amenazas y cobro de cupos
Según datos de la asociación de promotores de educación inicial y el colectivo Educar con Libertad, los delincuentes exigen pagos que oscilan entre los 10 mil y 70 mil soles a cambio de "protección". Aquellos que no pueden pagar sufren amenazas, atentados y hostigamiento constante, lo que ha llevado a muchas instituciones a cerrar sus puertas.
"Hay un subregistro de nuestros asociados que demuestra que son más de 300 colegios los que han cerrado a causa de la extorsión", indicó Giannina Miranda Lazo, presidenta del colectivo Educar con Libertad. Además, desde el 2020, el cierre de colegios en el país ha alcanzado la alarmante cifra de 11,000 instituciones, muchas de ellas por razones de inseguridad.
El impacto en docentes y estudiantes
Las amenazas no solo afectan a los dueños de los colegios, sino también a directores, profesores y alumnos. "En una escuela, un nido que debería ser el lugar más seguro, ahora se ha convertido en tierra de nadie", declaró Miranda en una entrevista con Canal N.
Los ataques recientes han generado temor en la comunidad educativa. Casos como el de los colegios Alfred Nobel, en Comas, y María de los Ángeles, en Pamplona Alta, que cerraron por estas amenazas, reflejan la gravedad de la situación.
El llamado de los colegios al Gobierno
Los colegios han solicitado apoyo urgente al Gobierno para frenar el avance de la delincuencia en el sector educativo. Sin embargo, según denuncias del colectivo Educar con Libertad, las autoridades no han tomado acciones concretas para brindar seguridad a las instituciones.
"Nos hemos reunido con el ministro de Educación, Morgan Quero, en septiembre del año pasado y le presentamos estadísticas y casos de todo el Perú. No obtuvimos respuesta alguna", afirmó Miranda.
Mientras la delincuencia sigue avanzando, los colegios piden medidas urgentes para garantizar un entorno seguro para los estudiantes y docentes. Sin soluciones inmediatas, más instituciones podrían cerrar, afectando a miles de niños que se quedarían sin acceso a la educación.