El informe “Monedas LATAM: Aún navegando el ‘Trump Trade’”, publicado por Credicorp Capital, destaca que el sol peruano cerró 2024 con una cotización de S/3,76 por dólar, en línea con las proyecciones económicas. La divisa se depreció solo un 1,3% durante el año, una cifra menor en comparación con otras monedas emergentes, lo que la consolida como una de las más resilientes en el actual contexto económico.
FACTORES MACROECONÓMICOS CLAVE
La estabilidad del sol peruano se debe a varios factores. Entre ellos, destaca el superávit en la cuenta corriente del país desde 2023, impulsado por términos de intercambio favorables. Además, la deuda pública representa solo el 34% del PIB, y las reservas internacionales equivalen al 29% del PIB, ofreciendo un respaldo financiero ante posibles choques externos.
El crecimiento económico también ha sido un pilar de esta estabilidad. En 2024, el PBI peruano creció entre un 3,2% y 3,3%, superando a países como Colombia, Chile y México. Credicorp Capital proyecta que el Perú liderará el crecimiento en América Latina en 2025, con un 2,8% de expansión económica.
IMPACTO GLOBAL Y PERSPECTIVAS FUTURAS
El panorama económico internacional también influye en la fortaleza del sol. Las políticas comerciales de Trump han generado incertidumbre global, elevando las tasas de interés de la Reserva Federal al 4% y fortaleciendo el dólar en un 7,1%. A pesar de este entorno desafiante, Credicorp Capital mantiene una perspectiva positiva sobre el sol peruano, proyectando que cerrará 2025 en torno a S/3,75 por dólar.
Sin embargo, existen riesgos a considerar. La regularización del Impuesto a la Renta en marzo y abril de 2025 podría ejercer presión bajista, mientras que la incertidumbre interna podría aumentar a medida que se acerquen las elecciones presidenciales de 2026. No obstante, proyectos como el puerto de Chancay podrían aportar estabilidad económica en un contexto geopolítico incierto.