Diariamente, miles de familias en el Perú emprenden una angustiante búsqueda por la pérdida del rastro de un ser querido. La Defensoría del Pueblo advirtió que, en mayo de 2023, se registraron 1028 denuncias por desaparición de mujeres en todo su ciclo de vida. Esto representa un incremento del 7 % a comparación del mes de abril.
Durante el año se han reportado 4434 denuncias durante el presente año, siendo los departamentos con más incidencia Lima (1508), Cusco (256), Junín (256), Lambayeque (250) y Arequipa (244).
Con respecto a las personas ubicadas, en mayo, la institución informa que fueron un total de 877; de este número, 529 eran mujeres de todas las edades. Esta cifra equivale a un 4 % más de la registrada el mes pasado. Los departamentos donde más se localizaron mujeres desaparecidas en lo que va del año fueron Lima (798), Junín (166), Cusco (155), Lambayeque (149) y Piura (108).
En un informe desarrollado por la Defensoría del Pueblo se señala que en mayo de este año 352 niños y adolescentes fueron reportados como desaparecidos. De esta cifra, 290 eran niñas y adolescentes mujeres, es decir, un 82 %. Lo cual podría advertir una correlación entre el género y la edad de las víctimas como factores de vulnerabilidad.
“Resulta clave que se fortalezca la intervención policial con debida diligencia en atención a las denuncias, y que se evalúen las dificultades para la aplicación de procedimientos y soluciones que permitan proteger y ubicar a las víctimas de manera oportuna. Asimismo, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables debe reforzar la intervención de los centros emergencia mujer (CEM) y las unidades de protección especial (UPE), que permitan, además, apoyar a las familias de las víctimas durante los procesos de búsqueda y ante la ubicación de estas.” ha sido una de las conclusiones expuestas en la página web de la institución.
¿CÓMO DEBE ACTUAR EL ESTADO ANTE UNA DESAPARICIÓN?
En un informe realizado por la Defensoría del Pueblo se expone los pasos a seguir que debe tener el Estado al recibir una denuncia de desaparición.
En primer lugar, se exhorta a las autoridades a tener una intervención oportuna, inmediata y sin discriminación, cumpliendo diligencias de búsqueda e investigación dentro de las 24 horas. Las autoridades policiales, fiscales y judiciales deben disponer acciones necesarias para ubicar a la víctima.
Con respecto a los procesos, se debe ofrecer a la familia los procedimientos idóneos para denunciar, tramitar y posibilitar una búsqueda e investigación efectivas desde las primeras horas y se debe trabajar bajo la presunción de que la persona desaparecida sigue viva y privada de su libertad. Finalmente, las denuncias deben ser recibidas por personal especializado en género y en temas de niñez y adolescencia, según corresponda, sin expresión de prejuicios y estereotipos de género.