Un total de 1,365 familias de comunidades andinas de la región Cusco y que viven a más de 3,500 metros sobre el nivel del mar, podrán mitigar este año el golpe de las heladas gracias a la implementación de viviendas térmicas.
Dicho trabajo social que se puso en marcha en las provincias cusqueñas de Espinar, Quispicanchi, Acomayo, Canas, Calca, Canchis, Urubamba, Cusco y Paruro, pudo ser posible al proyecto Mi Abrigo a cargo del Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes), quienes han invertido 18.4 millones de soles.
"Durante este invierno, las familias habitan sus viviendas originales, pero en mejores condiciones que antes, luego de que las casas fueran mejoradas completamente gratis gracias al proyecto Mi Abrigo", indicó Pedro Romero, jefe de la Unidad Territorial Foncodes Cusco.
¿Cómo funcionan?
Las denominadas también "casitas calientes" presentan una tecnología de muro "trombe", basada en el uso de láminas de policarbonato y tubos de PVC. Sin embargo, no es todo, pues cuentan con doble puerta y ventanas de maderas; así como piso de madera machihembrada y cielo raso, permitiendo conservar el calor dentro del inmueble, especialmente en las noches y madrugadas, donde la temperatura está por debajo de los cero grados centígrados. (Fuente: Andina)