En el Cercado de Lima, niños de escasos recursos y que se encuentran en estado de vulnerabilidad tendrán acceso a un espacio recreativo y de educación gracias a la instalación de una biblioteca comunitaria, ubicada en una casona del jirón Contumazá.
La biblioteca podrá recibir a 15 niños diariamente y los fines de semana hasta 30. Este proyecto es iniciativa de las jóvenes activistas Verónika Ferrari y Ana Karina Barandiarán. "Vimos que esta zona era una zona olvidada por el Estado", dijo una de ellas.
"UN ESPACIO SEGURO"
Se ofrecerán los servicios de lectura, talleres de arte y facilitará el acceso a clases virtuales. "Decidimos abrir este espacio para que sea un espacio seguro donde los niños puedan leer, pintar y salir de sus hogares donde hay hacinamiento y violencia", indicó.
Cabe señalar que la biblioteca comunitaria requiere el apoyo de la sociedad civil para comprar libros, acuarelas, materiales didácticos, instrumentos musicales, entre otros. Cualquier ayuda puede comunicarse al siguiente número: 950 163 319.
