Continúa la polémica por la boda de la venezolana Korina Rivadeneira con el corredor de autos Mario Hart. Pese a que la modelo tiene una orden de expulsión del país pendiente, una solicitud de refugio impide que se cumpla. Como ella, muchos de sus compatriotas también llegaron a Lima en busca de trabajo frente a la crisis que atraviesa Venezuela.
Un equipo de “La Noche Es Mía” recorrió las calles de Gamarra y pudo comprobar que muchos ciudadanos venezolanos se desempeñan en diferentes trabajos. Muchos de ellos ahora se dedican a comercializar alimentos y bebidas típicas de su país a los visitantes del concurrido emporio comercial.
Algunos lo dejaron todo, sus trabajos, casas, a sus familiares en busca de mejorar su situación económica. Con la venta de diversos productos, los ciudadanos venezolanos pueden enviar dinero para ayudar a sus seres queridos. Sin embargo, todos coinciden que vivir en otro país es muy difícil porque extrañan a sus familias.
Pese a las adversidades que les ha tocado vivir, mantienen la esperanza que en algún momento la situación en Venezuela cambiará y podrán encontrarse nuevamente con sus familias.