El jefe de Estado aseguró hoy que está dispuesto a disolver la Asamblea Nacional y anticipar las elecciones generales, debido al reciente rechazo de los parlamentarios de oposición a designar a su delegado ante la comisión que reestructurará el sistema judicial.
La atribución de cerrar el Congreso y convocar a comicios presidenciales está contemplada en la constitución ecuatoriana y ya había sido insinuada anteriormente por Rafael Correa, y se le conoce con la denominación de “muerte cruzada”.
“Nos vamos a la muerte cruzada, no voy a estar aquí pintado en la pared. Pierdo, me voy a mi casa. No importa si yo no estoy aquí para calentar un puesto. Estoy para cambiar este país”, dijo Correa Delgado.
El mandatario norteño señaló que la oposición está cayendo en “mañoserías y corruptelas” para bloquear la elección del representante de la Asamblea Nacional ante la comisión tripartita, y con ello estaría intentando conformar una mayoría “para boicotear al Gobierno”.