El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó que un terremoto de magnitud 6,9 se registró a las 21:59 horas en el centro de Filipinas, con epicentro a 10 kilómetros de profundidad cerca de la ciudad de Bogo, en la región de Cebú. El movimiento telúrico fue percibido en varias provincias de las islas Visayas, donde más de medio millón de personas sintieron los temblores.
POSIBLE TSUNAMI
La agencia sismológica de Filipinas (Phivolcs) advirtió sobre la posibilidad de un tsunami localizado, instando a la población de Leyte, Cebú y Biliran a mantenerse lejos de las playas y desplazarse hacia zonas más seguras en el interior. El USGS advirtió que un sismo de esta magnitud puede causar daños severos en estructuras mal construidas y moderados en edificaciones convencionales.
Los peores temblores se sintieron en el norte de Cebú y Leyte, donde se reportaron cortes de energía y evacuaciones preventivas. Aunque todavía no se ha confirmado la magnitud de los daños, las autoridades locales iniciaron patrullajes para evaluar la situación en las comunidades más vulnerables.
RÉPLICAS MANTIENEN EN ALERTA A LA POBLACIÓN
Minutos después del primer evento, se registraron varias réplicas de magnitud 5,0; 5,1 y 3,8, lo que generó temor entre los habitantes. Phivolcs reiteró a los residentes mantenerse alejados de la costa hasta nuevo aviso y permanecer atentos a las actualizaciones oficiales.
El sismo, uno de los más fuertes en lo que va del año en la región, ha reavivado la preocupación por la vulnerabilidad sísmica de Filipinas, un país ubicado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, donde los terremotos son frecuentes y a menudo devastadores.