Un atentado perpetrado el sábado 14 de junio de 2025 contra el precandidato presidencial colombiano Miguel Uribe Turbay durante un mitin en Bogotá ha llevado a las autoridades a realizar detenciones significativas. Según información oficial, dos menores de edad, de 15 y 17 años, fueron arrestados como presuntos responsables del ataque que dejó a Uribe Turbay en estado crítico tras recibir múltiples impactos de bala. Las autoridades colombianas, lideradas por la Fiscalía General de la Nación, continúan investigando los motivos detrás del incidente, que ha generado alarma en el ámbito político y ha reavivado recuerdos de episodios violentos en la historia del país.
El ataque ocurrió en medio de un evento público, donde los disparos sorprendieron a los asistentes y obligaron a una respuesta inmediata de las fuerzas de seguridad. Fuentes policiales indicaron que los menores actuaron de manera coordinada, utilizando armas de fuego, y fueron capturados poco después gracias a operativos en las inmediaciones del lugar. Uribe Turbay, quien fue trasladado de urgencia a un centro médico donde fue sometido a una cirugía, permanece en condición delicada, mientras su familia y el equipo médico evalúan su evolución. El caso ha puesto en el foco la seguridad de los líderes políticos en Colombia.
Contexto de violencia y reacciones políticas
Este incidente ha desatado una ola de reacciones en el espectro político colombiano, con numerosos líderes condenando el uso de la violencia como herramienta política. El atentado recuerda eventos históricos como los asesinatos de candidatos presidenciales en las décadas de 1980 y 1990, cuando sicarios al servicio de carteles de la droga eliminaron figuras como Luis Carlos Galán. Las autoridades han intensificado las investigaciones para determinar si existe una red organizada detrás de los menores detenidos, mientras la opinión pública exige respuestas sobre las medidas de protección para los aspirantes a cargos públicos en el país.
La Fiscalía ha informado que los dos jóvenes están bajo custodia y serán interrogados para esclarecer su participación y posibles vínculos con grupos criminales. Aunque no se han revelado detalles específicos sobre los sospechosos, las autoridades han asegurado que el proceso legal será exhaustivo para garantizar justicia. Mientras tanto, el estado de salud de Uribe Turbay sigue siendo un tema de preocupación, con su familia agradeciendo el apoyo recibido y pidiendo respeto durante este difícil momento.
