Antes de morir en la mañana de ayer, sábado, las últimas palabras pronunciadas por el papa emérito Benedicto XVI fueron: "Señor te amo". Así lo relató uno de los enfermeros personales que lo atendía desde la noche previa a su deceso.
El enfermero así se lo ha relatado al secretario personal de Ratzinger, monseñor Georg Gänswein, según recoge hoy el medio oficial de la Santa Sede, "Vatican News".
Señala además que, aproximadamente a las tres de la mañana, seis horas antes de morir, Benedicto XVI estaba grave, pero aún no agonizaba. En ese momento, el enfermero aseguró que le escuchó pronunciar la frase "Señor te amo" en idioma italiano.
SE DESPIDIÓ EN ITALIANO
"Benedicto XVI, con un hilo de voz, pero en un modo distinguible, dijo en italiano 'Señor te amo". Yo en ese momento no estaba pero el enfermero me lo ha contado. Estas fueron sus últimas palabras comprensibles, porque después no volvió a ser capaz de expresarse", refirió el monseñor alemán.
La Santa Sede ha publicado un testamento espiritual que Ratzinger redactó el 29 de agosto de 2006 y en el que, entre otras cosas, pide "perdón, de corazón" a quienes haya podido dañar a lo largo de su vida.
La capilla ardiente del papa emérito, retirado desde su histórica renuncia en 2013, abrirá mañana lunes y seguirá hasta el miércoles, mientras que su funeral será presidido el jueves por Francisco, su sucesor desde aquel entonces.
HOMENAJE A BENEDICTO XVI
El papa Francisco inauguró este domingo el año 2023 con un homenaje al "amado" pontífice emérito Benedicto XVI, fallecido la víspera, y cuyo funeral presidirá el próximo jueves en el Vaticano.
"Hoy encomendamos a la Santísima Madre al amado papa emérito Benedicto XVI para que lo acompañe en su paso de este mundo a Dios", dijo el papa durante la solemne misa del primero del año en la basílica de San Pedro.
"Nos unimos todos juntos, con un único corazón y una única alma, al dar gracias a Dios por el don de este fiel servidor del Evangelio y de la Iglesia", expresó el pontífice argentino desde la ventana del palacio apostólico al mediodía con ocasión del Ángelus dominical.
