Desde hace cuatro días, decenas de bomberos tratan de sofocar un incendio forestal que se desató en la franja noreste del estado de la Florida, en los Estados Unidos. Hasta el momento sin dejar heridos ni víctimas mortales.
Unas 1600 familias fueron obligadas a desalojar sus hogares, ante el avance incontenible de las llamas por varios frentes, informó Nikki Fried, comisionada de Agricultura del estado.
El fuego comenzó el lunes cuando una quema controlada por parte de un contratista privado, para despejar el terreno y construir un complejo de viviendas, se salió de control, explicó Fried.
En esta época del año las condiciones con perfectas para los incendios: baja humedad y fuertes vientos, agregó la funcionaria estatal, quien pidió calma a los residentes de la zona.
