En la última semana, al menos 42 personas han muerto y otras siete permanecen internados en distintos nosocomios de la República Dominicana, tras consumir alcohol adulterado.
Las autoridades informaron que los resultados de laboratorio indican que más del 50% de las víctimas no consumieron etanol sino otro componente químico de alto grado de mortalidad.
Las investigaciones señalan que los fallecidos consumieron clerén o triculí, tragos que se comercializa de manera clandestina y es consumido por personas de los sectores más desfavorecidos del país.
Tanto las autoridades sanitarias como la Fiscalía han abierto investigaciones para determinar la naturaleza del producto y para identificar a los fabricantes. Hasta el momento hay seis detenidos.