Tras comer más de 30 adornos navideños caseros hechos a base de pan de jengibre, un perro labrador de 7 años tuvo que ser sometido a a dos operaciones de emergencia.
El can de nombre 'Marley' fue intervenido en un hospital de mascotas de la ciudad de Dorset, en Inglaterra, después de que se enfermara de un momento a otro.
En su primera cirugía, los veterinarios le retiraron las cintas que se encontraban adheridas a las galletas. ''Había estado horneando las decoraciones de árboles de pan de jengibre, y las dejé en bolsas de regalo en el mostrador de la cocina, listas para darlas como regalos de Navidad. Pensé que los había dejado a salvo fuera de su alcance, pero cuando noté que faltaban algunos, instantáneamente supe quién los había tomado'', sostuvo su dueña.
Tras la operación que duró aproximadamente tres horas, los veterinarios lograron retirar 34 cintas decorativas que estaban causando un bloqueo ''potencialmente fatal'' en el organismo de 'Marley'. Asimismo, descubrieron que el perro se había tragado una gran cantidad de huesos, que también se encontraban alojados en su estómago.
