Su nombre es sinónimo de talento y leyenda y si hay una persona que puede personificar a la Salsa es Héctor Lavoe y a pesar de que su vida terminó en 1993 en Nueva York, su voz está más intacta y viva en el corazón de los salseros.
El Cantante de los Cantantes falleció un 29 de junio de 1993 tras sufrir un paro cardíaco por las complicaciones con el SIDA que lo aquejaba. En nuestro país ha dejado una huella indeleble y muchos recuerdan que en 1986, Lavoe pisó tierras peruanas para hacer una presentación en el Gran Estelar de la Feria del Hogar.
Los restos del intérprete de ‘La Fama’, ‘Juanito Alimaña’, ‘Mi Gente’, ‘La Murga’, ‘Aléjate’, ‘Periódico de ayer’, entre otras canciones, reposan en el Cementerio Civil de Ponce en Puerto Rico.