La captura de un implicado en un asalto a una familia en el distrito de Surco reveló una nueva modalidad de los ladrones. Utilizan bolsas magnéticas o Faraday para bloquear señales de geolocalización.
Durante el operativo, se encontraron estos dispositivos entre los objetos incautados al detenido, quien participó en un violento ataque armado contra un vehículo particular. "Introducen los celulares en estas bolsas para impedir el rastreo por GPS", explicó el coronel Juan Carlos Montúfar, jefe de la División de Investigación de Robos.
Funcionamiento del sistema antirrastreo
Las bolsas, fabricadas con materiales conductores como mallas metálicas, anulan cualquier señal emitida por los dispositivos robados. Según la policía, su bajo costo y fácil acceso las han convertido en herramientas clave para los delincuentes.
"Envuelven los equipos con este material magnético para cancelar la emisión de señales", detalló Montúfar durante la presentación de la evidencia incautada, entre ellas cinco teléfonos y dos laptops.
Evadir acciones policiales
Esta innovación responde a la necesidad criminal de evitar la localización mediante sistemas como el GPS. Al aislar los dispositivos en estas bolsas, los delincuentes dificultan la recuperación de los equipos y burlan los protocolos de seguridad, facilitando su reventa en mercados informales.