El investigador alemán Stefan Ziemendorff encontró el sarcófago de donde fue extraída, en 1877, la momia de la cultura Chachapoyas que inspiró al artista noruego Edvard Munch para pintar el cuadro El Grito.
Ziemendorff sostuvo que el lugar coincide con el relato del francés Pierre Vidal-Senèze, quien en 1877 llegó a Chachapoyas en la búsqueda de objetos para comerciar en Europa. La historia señala que Vidal-Senèze extrajo del lugar cuatro momias.
Sin embargo sólo se llevó la de un guerrero de la cultura Chachapoyas, que fue exhibida en el Museo Etnográfico del Trocadéro en París. Allí fue vista primero por el pintor francés Paul Gauguin, quien la observó y pintó varias de sus más famosas obras usándola como fuente de inspiración.
Después de Gauguin la vio Edvard Munch y, en base a ella, pinta ‘El Grito’, obra que es una de las más reproducidas en el mundo. El lugar del hallazgo en Amazonas tiene cuatro sarcófagos saqueados, pero uno de ellos tiene una pintura rupestre de un hacha, lo cual denota que guardaba los restos de un guerrero.
El investigador alemán agregó que este descubrimiento fue hecho en una zona de difícil acceso en el Cerro Angulo, en la provincia de Luya, en Amazonas, donde se identificó el sarcófago. Ziemendorff contó que Vidal-Senèze indicó en su relato que destruyó cuatro sarcófagos que presentan encima de la cabeza antropomorfa de barro otras cabezas más pequeñas.
El cráneo de esta momia de la Cultura Chachapoyas estaba trepanado, operación que se realizaba a los guerreros que sufrían golpes de piedras o mazas.
‘El Grito’ cumplirá 150 años el próximo jueves 12 de diciembre. El año pasado estableció un nuevo récord como obra de arte más cara del mundo, al ser subastada por la casa Sothebys por la astronómica cifra de 120 millones de dólares.