Las calles del distrito de Aguas Calientes, en Cusco, lucen saturadas de turistas que intentan adquirir entradas para ingresar al santuario de Machu Picchu. Muchos hacen fila desde las 4 a.m., mientras otros duermen en la vía pública para asegurar un boleto para el día siguiente.
ALCALDE HACE LLAMADO A MINCUL
La falta de entradas virtuales y la limitada atención en ventanilla han convertido el viaje a la maravilla mundial en un verdadero calvario logístico. Ante esta situación, Elvis La Torre, alcalde del distrito de Machu Picchu, responsabilizó directamente al Ministerio de Cultura por la falta de soluciones concretas.
“Es innecesario hacer dos colas para obtener un boleto. Además, el personal de la DDC solo trabaja de 3 a 10 de la noche, cuando deberían hacerlo en dos turnos desde las 8 de la mañana”, declaró.
La Torre recalcó que implementar más ventanillas y mejorar los horarios de atención aliviaría la demanda. Sin embargo, también advirtió que vender entradas únicamente de forma virtual no solucionaría el problema de fondo, ya que muchos turistas llegan sin haber planificado con anticipación su visita al santuario.
Hasta el momento, el Ministerio de Cultura no ha emitido un pronunciamiento oficial, mientras las filas continúan creciendo y la experiencia turística se ve deteriorada por la falta de organización.