El estadio que lleva el nombre del capitán de la selección peruana, Paolo Guerrero, y que fue inaugurado a principios del año 2018 con bombos y platillos en el Tambo, Huancayo, hoy luce totalmente abandonado y presentaría serias deficiencias en su construcción.
La obra fue entregada en el 2018 por la municipalidad del Tambo, por el entonces alcalde Aldrin Zárate, quien habría pertenecido en ese momento al partido político Perú Libre y habría sido una persona muy cercana a Vladimir Cerrón.
Personal de la Municipalidad del Distrito del Tambo en coordinación de la Procuraduría realizaron una inspección a las instalaciones del campo deportivo para determinar las serias deficiencias técnicas y estructurales existentes en su construcción.
En la actualidad la obra tiene un avance del 75% y según la Procuraduría y la Gerencia de Obras Públicas, se levantará información para determinar las acciones legales contra los responsables de dicha infraestructura. Según se anunció el año 2022 se reiniciará con la construcción del complejo deportivo.
