La Dirección Antidrogas de la Policía Nacional del Perú (Dirandro) logró el hallazgo de 327 kilogramos de cocaína de extrema pureza. Esta droga estaba oculta en paños impregnados con una sustancia líquida y se encontraba camuflada en cajas de cartón que originalmente transportaban paltas con destino a Italia.
El operativo reveló que un total de 5280 cajas de cartón que contenían paltas de exportación estaban a punto de ser enviadas por el puerto del Callao. En el interior de un contenedor, las autoridades descubrieron un sofisticado método de ocultamiento de droga que involucraba a otras personas de reputación cuestionable. La cocaína había sido acondicionada en cajas de cartón, con un doble fondo, que ocultaba paños amarillos impregnados con cocaína líquida.
La labor del personal de la División Portuaria Antidrogas continuó, y gracias a una medida de detención preliminar, se logró detener a Jesús Alberto Hurtado Díaz, el representante legal de la empresa responsable del envío de la mercadería contaminada. Hurtado fue ubicado en un hospedaje en San Miguel.
En paralelo, también se detuvo a Carlos Enrique Tomás Pérez, el individuo encargado de transportar las cajas contaminadas. Su captura tuvo lugar en el Jirón Las Gaviotas, en Santiago de Surco.
Cabe resaltar que, en lo que va del año, el trabajo del Departamento Portuario Antidrogas del Callao ha resultado en el decomiso de un impresionante total de 4893 kilogramos de alcaloide de cocaína de alta pureza.
Este sorprendente hallazgo condujo a la detención de dos figuras fundamentales en el engranaje criminal de una mafia dedicada a introducir en el mercado negro europeo millones de dólares en clorhidrato de cocaína.