La oscuridad de la madrugada, en pleno toque de queda, es ideal para el robo de autopartes, donde los ladrones escogen los vehículos que están estacionados en puntos estratégicos como zonas casi desoladas sin importar que son registrados por cámaras de seguridad.
Como el robo que sucedió en la cuadra 52 de la avenida Las Palmeras en distrito de Los Olivos, donde dos hampones aprovechando la oscuridad del lugar lograron apoderarse de la batería de un auto.
Según las autoridades estos ladrones solo necesitan de algunos minutos para apoderarse de la autopartes aprovechándose de herramientas para desconectan la batería y las alarmas de los vehículos.