Aprovechaban que sus víctimas estaban bajo los efectos del alcohol para robarles. Dos hombres vestidos de mujer viajaban a bordo de un taxi recorriendo las calles en busca de nuevas víctimas sin imaginar que miembros del Serenazgo de Lima andaba tras sus pasos.
Luego que asaltaron a un hombre que dormía en las inmediaciones de la plaza Dos de Mayo, los delincuentes huyeron en dirección a la avenida Argentina, pero en la cuadra 16 fueron detenidos por los oficiales.
Aunque trataron de negar las acusaciones, se les halló un morral azul, un celular y dinero de la víctima. Los delincuentes, junto al conductor de la unidad, fueron llevados a la comisaría de San Andrés.