La Sala Penal Nacional, que procesa al cabecilla terrorista de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán por el atentado criminal de Tarata, declaró ayer improcedente el pedido de sus abogados para declarar quebrado el juicio oral (anular todo lo actuado), lo cual hubiese significado volver el proceso a fojas cero.
El argumento del abogado de Abimael Guzmán, Alfredo Crespo, fue que se había excedido el plazo máximo que exige la ley entre las audiencias. Cuando el tiempo máximo que puede haber entre dos audiencias de un proceso complejo es 12 días, según establece el Código de Procedimientos Penales.
Además la audiencia que se realizó el pasado 12 de setiembre, no debía tomarse en cuenta debido a que no se presentaron los testigos. Crespo culpó al Ejecutivo de haber impedido que se realice la sesión por razones políticas. Sin embargo, la Sala Penal declaró improcedente el recurso de la defensa.
Por otro lado, el congresista de Fuerza Popular, Marco Miyashiro, fue citado en calidad de testigo en el juicio oral que se lleva a cabo en la Base Naval el próximo 10 de octubre por haber sido miembro del Grupo Especial de Inteligencia Nacional (GEIN).