El excanciller Miguel Ángel Rodríguez Mackay sostuvo que los recientes mensajes públicos de Donald Trump no deben leerse como anuncios improvisados, sino como señales calculadas dentro de una estrategia mayor. A su juicio, el exmandatario estadounidense “sabía perfectamente que todo el mundo iba a escuchar su mensaje” y utilizó esa atención global para marcar distancia con la política exterior del gobierno anterior, en un contexto que —según indicó— prepara el terreno para un escenario de mayor presión sobre Venezuela.
Desde su análisis, el internacionalista afirmó que Washington estaría construyendo un marco discursivo que justifica una eventual acción armada. “Lo que ha hecho Trump es crear una doctrina que legitime la acción bélica”, explicó, al señalar que la caracterización de Nicolás Maduro no solo como dictador, sino también como líder vinculado al narcotráfico, busca reforzar esa narrativa ante la comunidad internacional.
Venezuela como un escenario “sui generis” en la política hemisférica
Rodríguez Mackay remarcó que la situación venezolana no puede extrapolarse al resto de América Latina. “Estamos hablando de un caso específico, sui generis, atípico”, afirmó, al recordar que se trata de un régimen con más de dos décadas de continuidad en el poder y con un control policial interno que, según dijo, impide una salida exclusivamente interna. En ese sentido, sostuvo que “el elemento exógeno y el endógeno se van a juntar” para forzar un desenlace político.
Frente a los temores de que una intervención pueda afectar a otros países de la región, el exministro descartó ese escenario. “No creo que se vaya a crear un precedente para América Latina o el Perú”, señaló, diferenciando el caso venezolano de otros gobiernos, como el colombiano, donde —dijo— existe una relación estratégica con Estados Unidos que opera como factor disuasivo.
Finalmente, el excanciller consideró que Washington evaluaría todas las alternativas posibles para evitar un mayor derramamiento de sangre. “Estoy persuadido de que todas esas posibilidades están contempladas”, afirmó, al referirse a una eventual salida negociada de Maduro hacia otro país. En su opinión, cualquier opción que reduzca la violencia “va a ser preferida de todas maneras” por Estados Unidos.


