Nuevamente la devastada ciudad siria de Alepo se deteriora por los constantes bombardeos. Esta vez seis personas perdieron la vida durante un ataque registrado el fin de semana.
Al noroeste de la ciudad, donde los barrios están bajo el dominio de los rebeldes, varias bombas fueron lanzadas desde helicópteros y terminaron estrellándose contra el mayor hospital de la zona. Es el segundo ataque en menos de una semana, pero esta vez el daño fue peor.
La ofensiva de este fin de semana apuntó a destruir varias vías de abastecimiento a zonas rebeldes.