El candidato republicano Donald Trump protagonizó una nueva polémica al expulsar de uno de sus eventos a un bebé que lloraba.
Trump pidió que retiren al bebé que cesaba de llorar, argumentando que le incomodaba que ello ocurriera mientras daba su discurso. Este hecho no dudo en ser cuestionado por el vicepresidente demócrata, el senador Tim Kaine.
Este acto se suma a la ola de críticas luego que se enfrentara con los padres de un soldado musulmán. En tanto el presidente Barack Obama, afirmó que el Trump, está demostrando una y otra vez que no está capacitado para ocupar la casa blanca e instó a los líderes del partido republicano a retirarle su apoyo.