Italo Flores Silva inaugura "El Otro Edén", una exposición donde la naturaleza y la peruanidad se fusionan a través de esculturas moldeadas en arcilla extraída de los ríos. El artista, reconocido con el segundo puesto en el Concurso Nacional de Escultura en Cajamarca en 2023 y 2024, presenta obras que guardan mitos, viajes y sueños convertidos en un paraíso posible tras dos años de trabajo.
Flores Silva explica que su proceso creativo es físico e intuitivo. "Yo pienso con las manos y mis manos me dan respuestas. Mis manos tocan, ven, sienten y la arcilla me responde y yo la escucho", señala.
Exigencia y conexión con lo ancestral
El escultor destaca la exigencia de este arte, que requiere trabajar muchas horas con el cuerpo para dominar el material antes de que se seque o quiebre. Cada pieza comienza en arcilla, libre y flexible como un dibujo que puede borrarse o rehacerse, pero al pasar al yeso las formas se vuelven permanentes.
También revela que sus creaciones se basan en sus sueños y visiones personales. "El estado de sueño es tan vasto, tan profundo. Dormimos todos los días que creo que hay información para recolectar hasta el último día que me toque en esta tierra", destaca.
Obra vinculada con su familia
Las esculturas conectan con lo ancestral a través de historias familiares y emociones universales. Flores Silva comparte que una de sus obras, la tortuga, está vinculada con su abuela. "La representa a ella, a su personalidad, a su forma de ser, a un instante de su vida", agrega.