Nuevamente las excavaciones por las obras de instalación de gas permitieron que se encuentren más vestigios de la cultura peruana, esta vez los arqueólogos han encontrado una tumba funeraria de aproximadamente 600 años de antigüedad en el asentamiento humano de Nueva Jerusalén en el distrito de San Martín de Porres.
Además, se han hallado curiosas vasijas con motivos de un mono y un maíz como decoración, además de otros cuencos y vasijas en los alrededores del fardo funerario que pertenecerían a la cultura Ichma Inca.
Durante los trabajos de instalación de gas natural se ha encontrado ocho hallazgos, de los que este último es el más importante. Los arqueólogos aún no han terminado de excavar el fardo, pero presumen que en su interior podría haber dos personas por las dimensiones que tiene.