Los cerros y arenales de Lima cambian de aspecto con un poco de color, creatividad y muchas ganas, pues las casas que se encuentran en estas zonas han sido remodeladas por sus propios moradores.
Con la esperanza de vivir un poco mejor, estos pobladores de bajos recursos le han dado la vuelta a su vivienda y le han añadido toques de alegría con unos arreglos muy sencillos, baratos y creativos.
Porque al peruano no le falta empuje y garra para salir adelante aunque no se encuentre en muy buena situación, en este reportaje Al Sexto Día mostrará cómo algunos pobladores han cambiado sus sencillas casas a envidiables viviendas.