Normalmente se piensa que, en invierno, debido al frío, las personas necesitan más contacto físico, lo que hace que aumenten las relaciones sexuales, creyendo que en el verano podríamos creer todo lo contrario, que se evitase el contacto físico por culpa del calor, pero no es así.
Para muchos el verano es una inquieta temporada para el amor, ya el calorcito hace que por dentro el fuego para amar se encienda más. Y es que, según estudios, las temperaturas extremas y las condiciones climáticas adversas pueden, afectar la libido y el deseo sexual de algunas personas.
Para los expertos el calor excesivo puede tener diversos efectos en el cuerpo y en el estado de ánimo, lo que puede influir en la respuesta sexual de cada individuo, sobre todo en las calidades noches de verano.
En verano el calor suele propiciar los encuentros sexuales más gratos, debido a que los cuerpos producen más oxitocina y endorfinas, relacionadas con el deseo sexual, haciendo que este aumente.
En esta crónica de Al Sexto Día, tome sus precauciones ya que la temperatura subirá al máximo.
