El canciller Elmer Schialer ratificó ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso que la isla Chinería pertenece indiscutiblemente al Perú y que no existe margen de duda respecto a la delimitación establecida en el Tratado Salomón-Lozano, suscrito en 1922 con Colombia. El diplomático subrayó que los planos aprobados por ambas naciones precisan con coordenadas exactas la línea divisoria, descartando cualquier interpretación arbitraria.
Durante su exposición, Schialer destacó que el trazado del talweg del río Amazonas, base del acuerdo fronterizo, fue elaborado con rigurosidad técnica y cuenta con plena validez jurídica. En esa línea, reafirmó que la Comisión Mixta de Vecindad Peruano-Colombiana (COMPERIF) no puede ser empleada para renegociar un tratado ya establecido, pues se trata de un órgano técnico orientado únicamente a velar por el cumplimiento de lo pactado. Asimismo, anunció que el Perú propuso que la próxima reunión de esta instancia se realice en Lima los días 11 y 12 de septiembre.
El ministro de Defensa, Walter Astudillo, también se presentó en la sesión parlamentaria —que se extendió por más de tres horas y pasó incluso a carácter reservado— para informar sobre las acciones de las Fuerzas Armadas en la frontera. Astudillo aseguró que el Perú mantiene una relación fluida y de cooperación con los ejércitos de los países vecinos, en especial con Colombia, pese a la tensión generada por las recientes declaraciones de su gobierno.
SOBERANÍA NACIONAL
Ambos funcionarios remarcaron que el Perú seguirá defendiendo su soberanía en todos los foros diplomáticos y técnicos, y que no aceptará cuestionamientos sobre un territorio que ya fue definido en un tratado internacional vigente. La controversia se mantiene luego de que Colombia insistiera en que la isla Chinería no debería ser atribuida al Perú, lo que ha elevado la tensión diplomática entre ambos países amazónicos.