La presidenta Dina Boluarte se enfrenta a un nuevo escándalo tras revelarse detalles sobre las cirugías estéticas a las que se sometió en 2023. La mandataria había asegurado en un mensaje a la Nación que su intervención quirúrgica fue estrictamente necesaria por razones de salud, sin embargo, se ha confirmado que la operación incluyó retoques estéticos en su rostro.
Según el doctor Mario Cabani, quien realizó las cirugías, Boluarte fue operada el 28 de junio de 2023 y permaneció sedada durante más de dos horas en el quirófano, utilizando gasas de hielo día y noche para recuperarse. Sin embargo, mientras aún estaba internada, la presidenta firmó dos decretos desde la clínica, lo que ha generado cuestionamientos sobre la legalidad de sus acciones en ese periodo.
Diversos congresistas, como Jorge Montoya y José Williams, expresaron su preocupación por la falta de transparencia, argumentando que, de haber sido más clara desde el principio, la crisis de credibilidad que enfrenta la mandataria podría haberse evitado. Para algunos, la omisión de funciones y la posible falsificación de firmas en los decretos firmados mientras estaba incapacitada, son puntos que deben ser evaluados por la Fiscalía.
INFRACCIÓN CONSTITUCIONAL
El constitucionalista Víctor García Toma considera que no existe un marco normativo claro sobre la solicitud de licencia por razones de salud, lo que complica la posibilidad de una infracción constitucional en este caso. Sin embargo, el Tribunal Constitucional ha otorgado al Congreso la facultad de definir qué constituye una incapacidad moral permanente, lo que abre la puerta a una posible vacancia de la presidenta, como sugiere la constitucionalista Beatriz Ramírez Huaroto.