Durante el último fin de semana, el excandidato presidencial Rafael López Aliaga tuvo polémicas declaraciones en una manifestación que se realizaba en el Centro de Lima en respaldo a la candidatura de Keiko Fujimori. "Viva la democracia, muerte al comunismo, muerte a Cerrón y a Castillo", fueron las palabras de López Aliaga.
Desde el partido Renovación Popular, intentaron justificar a López Aliaga asegurando que se refería a una muerte política. Es por ello que, Jorge Montoya alegó que el excandidato presidencial es una persona que defiende la vida.
Se trata de un discurso violento que, ha identificado al excandidato presidencial durante la primera vuelta. Sin embargo, Pedro Castillo también ha recurrido a este tipo de calificativos, tal es el caso de lo sucedido en su propia tierra y con machete en mano, apuntando al exministro del Interior, Carlos Basombrío.
ERRADICAR LOS DISCURSOS VIOLENTOS
Con la finalidad de erradicar el matiz violento de mensajes como los registrados en las últimas horas, y que se siguen difundiendo durante esta campaña electoral, el Arzobispo de Lima, Monseñor Carlos Castillo, pidió prudencia a la clase política durante su homilía del último domingo.
Por su parte el Cardenal Pedro Barreto, primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal, condenó lo dicho por López Aliaga. "Es una vergüenza para el país, creo que una expresión como lo ha hecho él es inaceptable", expresó.
Además, advirtieron que los mensajes violentos como los mencionados por Rafael López Aliaga y Pedro Castillo podrían desencadenar acciones del mismo tipo.
Es por ello que, el excandidato presidencial Rafael López Aliaga fue denunciado ante la Fiscalía por los presuntos delitos de amenaza de muerte e incitación al odio.