La congresista Carolina Lizárraga se presentó en las comisarías de Monserrate y San Andrés, en el Cercado de Lima, para constatar el estado de los jóvenes que fueron detenidos por participar de las protestas en rechazo de la vacancia presidencial y del flamante mandatario Manuel Merino.
Lizárraga sostuvo que viene supervisando la situación de los detenidos en su calidad de parlamentaria y miembro de fiscalización. "Hemos venido acá para supervisar este tema en nuestra calidad de congresista y miembro de la comisión de fiscalización", explicó.
De esta manera, la parlamentaria marcó distancia con Julio Guzmán, a quien criticó al dejar entrever que utilizaría la "indignación de la población" para sus propios fines.