El jefe de Estado defendió su inicial plan de gobierno la Gran Transformación y criticó con dureza a los legisladores de izquierda que renunciaron a las filas de Gana Perú aduciendo que este no cumple sus promesas electorales.
“Sí se puede hacer la Gran Transformación, aunque haya gente que no quiere, la gran transformación no son palabras sino son hechos”, manifestó, rechazando la violencia en las protestas antimineras en Espinar y Cajamarca.
“Sin violencia, sino unidos, trabajando juntos, no interpretando lo que ellos quieren, todo el mundo manosea al pueblo. Todos se rajan la vestidura por el pueblo y no hacen nada”, precisó durante la inauguración de obras de agua en Villa María.