5 mariachis de nacionalidad venezolana fueron sometidos a maltratos por parte de comuneros de Cochas Grande, en el distrito del Tambo, Huancayo. Los pobladores del sector confundieron a los ciudadanos extranjeros con delincuentes y procedieron a castigarlos.
El hecho se produjo en la víspera. Los comuneros terminaban su ronda nocturna, cuando intervinieron un vehículo con 5 personas a bordo quienes estaban bebiendo licor. Cuando los habitantes les pidieron que se identifiquen, los 5 mariachis venezolanos se negaron, lo cual bastó para que sean sindicados como delincuentes.
Los comuneros aplicaron la llamada "justicia popular", dejando semidesnudos a los extranjeros y obligándolos a caminar de esa forma por los alrededores del sector, para finalmente castigarlos a latigazos uno por uno. Tras varias horas de castigo, los agraviados fueron entregados a la policía.
No se arrepienten
Lejos de arrepentirse por su error, los comuneros de Huancayo defendieron su accionar argumentando que los venezolanos no querían identificarse, asimismo, advirtieron que continuarán castigando a todo el que se atreva a delinquir en los alrededores, aunque la policía se oponga.