En la ciudad de Trujillo, un hotel ubicado en una céntrica avenida, fue el nuevo blanco de la delincuencia. Los hampones se hicieron pasar como clientes y tras verificar que no había seguridad de inmediato dieron inicio al asalto.
Como quedó registrado por la cámara de seguridad del negocio, uno de los delincuentes sacó una pistola y la rastrilló, para que su víctima vea que no se trataba de una réplica y mientras este amenazaba al trabajador, su cómplice se encargó de sustraer todo el efectivo que se encontraba en una caja de madera.
Al inicio de esta grabación se ve a un tercer cómplice, se trata de una mujer que al parecer fue el señuelo perfecto para que la víctima abra la puerta del hotel y el resto de banda cometa el atraco.
Tras el robo la policía realizó un operativo y logró capturar a dos de los ladrones. Las investigaciones continúan a cargo del Ministerio Público.