El centro de la ciudad de Trujillo quedó inundado luego que se activara la quebrada San Idelfonso, ubicada en el distrito de El Porvenir. El agua ingresó a las viviendas y discurrió por las principales avenidas y calles.
Los centros comerciales cerraron sus puertas y las entidades públicas enviaron a sus empleados a sus casas. Los vecinos fueron alertados por la policía y agentes de serenazgo quienes recomendaron que ingresaran a sus viviendas para evitar que sean perjudicados.
El agua continuó su curso inundando al menos unas 50 cuadras de la ciudad. El desborde del río se dio cuando las autoridades regionales y locales, e incluso el congresista Richard Acuña estaban reunidos en la Plaza de Armas evaluando los daños que dejaron las lluvias en la región.