Cientos de choferes acataron desde este lunes un nuevo paro de transporte público en Lima como respuesta a la creciente ola de inseguridad que golpea al sector. Desde las zonas norte, sur y este de la capital, varios vehículos bloquearon las principales avenidas en señal de protesta, exigiendo al Gobierno medidas urgentes frente a la criminalidad que afecta a conductores y pasajeros.
En el distrito de San Juan de Lurigancho (SJL), especialmente en el cruce de las avenidas San Hilarión y Canto Grande, unidades de distintas empresas de transporte fueron retenidas por efectivos de la Policía Nacional. Los manifestantes tenían previsto llegar hasta la zona de Caja de Agua para continuar su protesta y luego dirigirse al Congreso de la República.
Un amplio contingente policial se desplegó para evitar el avance de los vehículos, generando enfrentamientos verbales y malestar entre los transportistas. A la movilización también se sumaron comerciantes del mercado Mariano Melgar, quienes reclamaron mayor presencia policial ante el incremento de asaltos y extorsiones en la capital.
CHOFERES EXIGEN PROTECCIÓN FRENTE A ATAQUES Y EXTORSIONES
Durante el último fin de semana, dos conductores de transporte público fueron atacados a balazos por extorsionadores que les exigían el pago de cupos. Estos casos se suman a decenas de denuncias de choferes víctimas de amenazas y agresiones por parte de bandas criminales que operan en distintas zonas de Lima.