La muerte del Papa Francisco ha conmocionado a millones de fieles católicos en todo el mundo. En el Perú, su visita en 2018 dejó una huella imborrable, especialmente entre quienes pudieron verlo, saludarlo o recibir su bendición.
Uno de esos momentos marcó la vida de Thiago, un niño que por entonces enfrentaba una grave enfermedad. Según su familia, tras recibir la bendición del Santo Padre, su salud mejoró de manera inexplicable, lo que consideran un milagro atribuido a la intercesión del Pontífice.
“Mi hijo sufría de sarcoma en cuarto grado. Tenía un tumor maligno muy agresivo. Cuando el Papa llegó en 2018, fui a la nunciatura y le pedí que me permitiera entrar. Tras una larga espera, bendijo a mi hijo y le dijo que ya estaba curado”, relató Pedro Otero, padre de Thiago.
MILAGRO DEL PAPA FRANCISCO
Según cuenta, al momento de recibir la bendición, al niño aún le faltaban tres sesiones de quimioterapia. Sin embargo, cuando acudieron al hospital para continuar el tratamiento, los médicos le informaron que ya no era necesario, pues no había rastro de la enfermedad.
Hoy, Thiago lleva una vida normal y guarda un rosario bendecido y entregado por el Papa Francisco, un crucifijo que hoy tiene guardado celosamente como un recuerdo único de quien, según creen, fue clave en su recuperación.
