En medio del paro de transporte convocado para exigir mayor seguridad en las calles, un nuevo hecho de violencia sacudió a los transportistas. Un bus de la Línea 42, conocida como "El Rápido", fue baleado por presuntos extorsionadores mientras se encontraba en circulación. La unidad recibió tres impactos de bala que estuvieron a punto de alcanzar al conductor, quien logró salir ileso del ataque.
Según testigos y vecinos de la zona, la empresa propietaria del bus viene siendo amenazada desde hace semanas por al menos dos bandas criminales distintas. “Pagan cupos a una banda y ahora los que los amenazan son otros”, relató un testigo, quien también afirmó que no se trata de un hecho aislado, ya que días atrás también hubo intimidaciones en la oficina de la empresa. El temor ha calado hondo entre los conductores y usuarios, quienes aseguran que ya ni siquiera se sienten seguros en la calle.
Este atentado ocurre pocos días después de otro similar en San Juan de Miraflores, donde sujetos armados dispararon contra un bus. Gracias a las imágenes de una cámara de seguridad, la Policía logró identificar y capturar a los miembros de la banda criminal “Los Matarifes de Las Flores”. Entre los detenidos figura Richard Quispe Caycho, alias “El Cojo”, un hombre con muletas que sería el cabecilla del grupo. Junto a él fueron arrestados Denis Huaasca Paucar, José Choque Rojas y Eduardo Arteaga Carrión, todos con antecedentes por robo.
TRABAJAN CON MIEDO
Mientras los “Matarifes” fueron puestos a disposición de las autoridades, el caso de la línea “El Rápido” aún permanece sin resolver. Los conductores continúan trabajando con miedo, en un contexto donde la extorsión y la inseguridad parecen haberse convertido en parte del día a día del transporte público limeño. La Policía continúa con las investigaciones para dar con los responsables de este nuevo ataque.
