Un meticuloso seguimiento de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior (DIGIMIN) permitió desarticular a la banda criminal denominada DESA, acusada de extorsionar a transportistas en la capital.
Las imágenes recogidas durante la investigación muestran a los integrantes de la banda cobrando "cupos" a los conductores de autobuses de la empresa "Translicsa". La red criminal estaba perfectamente organizada, con cada miembro cumpliendo un rol específico.
Algunos de ellos se encargaban de sembrar el terror entre los transportistas, utilizando pasamontañas y armas, e incluso recurriendo a la figura de Hitler y Baphomet, un antiguo ídolo pagano representado como una cabra con cabeza humana.
ALIAS 'TIMMY'
De esta manera, lograban "alinear" a los 150 transportistas que tenían en sus grupos de WhatsApp. El líder de la organización era un joven venezolano de 20 años, conocido como "Edu" o "Edward" con el apoyo de Anderson Santos Verenzuela, alias "Timmy", de 25 años, quien se encargaba de ejecutar las amenazas de la banda.