Una joven fue víctima de un robo de celular mientras realizaba compras en el mercado Santa Rosa, en San Juan de Lurigancho. Tras rastrear su teléfono con su iPad, logró ubicarlo en las Malvinas, donde se estaba llevando a cabo un operativo contra el mercado negro de dispositivos móviles.
Con la esperanza de recuperar su equipo, pidió ayuda a la policía, pero fue rechazada inicialmente, ya que los efectivos estaban abocados al operativo. A pesar de la urgencia, la respuesta de la Policía Nacional fue limitada.
Según el coronel Fidel Cárdenas, jefe de la División de Investigación de Delitos contra el Estado, se requería una orden judicial para intervenir los locales y recuperar el celular. Aunque el GPS del dispositivo indicaba la ubicación exacta en uno de los stands, la policía no pudo actuar inmediatamente.
DENUNCIA PARA UN POSTERIOR OPERATIVO
La joven, frustrada por la inacción de las autoridades, expresó su indignación. Finalmente, su denuncia fue registrada para un posterior operativo, dejando a la víctima con la esperanza quebrantada mientras los delincuentes se salían con la suya.